Jorge Medina Méndez: “La gente debe entender que la corrupción mata”

(Por Ricardo Monzón / Perú21). Proética publicó su X Encuesta Nacional de Percepciones de la Corrupción. El presidente de este organismo que agrupa instituciones de la sociedad civil, Jorge Medina, analiza los datos recogidos por el mencionado estudio.

En la presentación de la encuesta, usted dijo que más importante es una estrategia para luchar contra la corrupción a una estrategia para educación, salud, infraestructura, etcétera. ¿Por qué?
Yo dije lo siguiente: Todos los países tienen cosas importantes, su defensa nacional, la seguridad de sus ciudadanos, la educación, la salud. Cada uno de esos elementos tiene un responsable, que son los ministros. ¿Pero quién es el responsable de combatir la corrupción, la cual afecta a eso que, como país, has decidido que es importante? No hay respuesta. El otro tema son las estrategias. Buenas o no, las hay en seguridad, educación. ¿Dónde está la estrategia de la anticorrupción? Necesitamos una que nos diga de qué tamaño es la corrupción, cómo afecta, qué es lo que la origina. Esto último es la clave.

¿Qué estamos haciendo hasta ahora?
Lo que estamos haciendo es: tenemos fiebre y te tomas el antigripal, pero tu problema no es la fiebre, es lo que origina la fiebre. Esa es la discusión.

¿Y cuál es la respuesta?
Lo que causa la fiebre es el mal ejercicio de la política en el Perú. Me explico: tantos gobernadores regionales presos, dos presidentes en la cárcel, uno fugado, el otro investigado. Fiebre. ¿Por qué? Porque quienes llegan al poder no son los mejores. ¿Entonces por qué llegan al poder? Porque tienen recursos. ¿De dónde vienen esos recursos? Ahí comienzas a ir a las causas: financiamiento ilícito. ¿Acaso es una novedad que el narcotráfico financia la política? ¿Acaso es una novedad que el narcotráfico, la minería ilegal, el contrabando, la tala ilegal, el crimen organizado se infiltró en el Poder Judicial (PJ) y la Fiscalía? ¿U Orellana se paseaba ahí por nada? No pues.

¿Dónde empieza el cambio?
Debe haber una profunda reforma política y electoral. Ahora, hay que ser realistas. ¿Qué vende más: Toledo se tiró 20 palos en Río, o necesitamos tomar una decisión con el voto preferencial, bancarizar todos los aportes a las campañas políticas y poner un límite a las actividades como la pollada, la cena, la tómbola? Eso no tiene sex appeal pues.

¿Cuál es el reto?
El reto está en que gobernantes, empresarios, periodistas, académicos hagamos la relación entre la causa de esa fiebre y cómo le impacta al ciudadano. Recién ahí vamos a poder ejercer presión para que se produzcan las reformas. Sin reformas podemos meter presos a todos, pero no resolveremos el problema y mañana surgirá el Lava Jato de turno.

Pero quienes deben actuar para hacer las reformas son los que están desprestigiados en la encuesta. ¿De dónde debe partir la voluntad?
¿En manos de quién está hacer las reformas? Del Congreso. ¿Quién es el único que puede decirle al Congreso “anda por este camino”? Los votantes, los ciudadanos. Ahí está el kit del asunto. La gente tiene que entender que la corrupción mata porque va a educarse mal, va a curarse menos, la inseguridad aumentará… Eso hará que la gente sienta dolor, se indigne y actúe.

En la encuesta se observa que hay un alto porcentaje de tolerancia a la corrupción.
Hay un poder fáctico que está dormido: los jóvenes, a ellos les indigna más la corrupción. ¿Por qué no usamos su fuerza? ¿Por qué no hacemos una alianza con las universidades y les decimos “qué onda con esto, ¿cuál es tu visión?”. Hay que llamarle la atención a la academia que debería estar activa ante estos temas.

¿Por dónde debe ir el esfuerzo anticorrupción si este estará cimentado sobre un terreno total de informalidad del cual se valen los peruanos para curarse, educarse, etc.?
¿Por qué hay informalidad? Porque hacer las cosas de forma apropiada cuesta mucho, porque no hemos definido las reglas, mucho trámite, porque las personas que están a cargo de la función pública no están bien remuneradas… Vas analizando. Eso es lo que han hecho los países que han progresado y han tenido un buen liderazgo. Entonces, cuando me preguntas qué hacemos con la informalidad, yo te digo: ¿cómo te comes un elefante? A pedacitos.

¿Es cuestión de tiempo?
No vamos a resolver el tema de la informalidad en cuatro o cinco años, pero sí podemos avanzar. Tenemos que ser estrategas y pensar en la causa. Hacer lo que se conoce como política de Estado, esa que no depende del gobernante de turno. ¿Sabes cuál es la garantía ahí? Que subes a la ciudadanía al coche, porque tú no eliges a la ciudadanía cada 5 años. Por eso es fundamental la ciudadanía.

¿Qué esfuerzo debe hacer el presidente de la República?
Yo creo que el presidente tiene una gran oportunidad que está desperdiciando. Si capta el malestar de la población, podría ganar mucho respaldo. A él le toca y creo que tiene condiciones de hacerlo. El 75% le dice que su gobierno está haciendo nada o casi nada, pero al mismo tiempo el 44% dice que él debe liderar esto. El presidente en esta encuesta ha recibido un mandato. Él fue elegido con una promesa de estrategia anticorrupción. Se comprometió, ahora no puede renunciar a ello.

Foto: Proética

29/09/2017

José Ugaz: “PPK no tiene el tema anticorrupción en su ADN”

(Por Rocío la Rosa Vásquez / El Comercio). El presidente de Transparencia Internacional, José Ugaz, se pronunció sobre el papel del mandatario Pedro Pablo Kuczynski en la lucha contra la corrupción, el eventual indulto humanitario a Alberto Fujimori y el arresto pendiente de Alejandro Toledo en Estados Unidos.

El presidente Kuczynski ha dicho que un eventual indulto humanitario a Alberto Fujimori es un tema médico y ha dejado abierta la posibilidad de concederlo. ¿Estaría de acuerdo con este beneficio?
Una condena penal no es un acto de venganza. Precisamente los conflictos se judicializan para evitar eso. No se trata de que el ex presidente Alberto Fujimori, si estuviera padeciendo una enfermedad grave y terminal, muera en prisión. Si existe un certificado médico que confirma que [Fujimori] padece de una enfermedad que cumple con los requisitos que establece la ley, entonces no debería haber ningún problema en ponerlo en libertad. La norma dice que corresponde el indulto humanitario cuando se trata de una enfermedad terminal y que pone en riesgo la vida del interno.

¿Si bien la primera ministra ha dicho que el tema no está en agenda, debería tomarse una decisión ahora para evitar que el tema siga generando ruido político?
Creo que no ha sido positivo este devaneo. Es como si el presidente hubiera estado pensando en voz alta, un día decía ‘lo voy a indultar’, ‘no sé’, ‘lo estoy pensando’. Y con razón desde la oposición, sobre todo los familiares, han venido diciendo ‘no juegue usted con las emociones’ vinculadas al indulto. El presidente ha dicho que esto esta en el ámbito de la medicina y si la primera ministra ha dicho que el tema no está en agenda, debemos asumir que efectivamente no está siendo considerado el tema.

¿Tras un eventual indulto, él estaría en su derecho de retornar a la actividad política?
Si hay un perdón, este levanta cualquier posibilidad de impedirle participar en un debate público, expresar sus ideas y circular libremente como un ciudadano común. Después de los años transcurridos y las circunstancias del encierro, no creo que Fujimori esté en condiciones de asumir un rol político activo. Será mas bien un elemento simbólico de su partido.

¿Coincide con Mercedes Aráoz en que las críticas de Mario Vargas Llosa a un eventual indulto a Fujimori obedecen a que perdió la elección frente a él en 1990?
No lo creo. El señor Vargas Llosa es una persona con profundas convicciones democráticas y considera, como muchos en este país, que el ex presidente Fujimori fue una persona que destruyó la democracia e incurrió en gravísimas violaciones a los derechos humanos. Por lo tanto, no es adecuada esta visión de decir que acá hay una vendeta personal y está opinando en base a su resentimiento, ya pasaron muchos años desde que Vargas Llosa perdió las elecciones y creo que él ha tenido una conducta pública consistente en defensa de los valores y principios democráticos

Caso Toledo

¿Le parece que Estados Unidos está dilatando el arresto de Alejandro Toledo, solicitado por la justicia peruana?
Demora por parte de los Estados Unidos no ha habido, los procesos de extradición en ese país tienen reglas establecidas que para el Perú no son nuevas. Ha habido varias personas que han sido extraditadas por ese país como Carlos Manrique de CLAE, creo que después de casi dos años, y luego algunos personajes vinculados al montesinismo como Telmo Hurtado. En todos ellos hablamos de plazos que no han sido menores a un año. Sin embargo, desde el punto de vista sustantivo, creo que la situación de Toledo está echada, que debe ser extraditado.

Según la última encuesta nacional sobre percepciones de corrupción de Proética, para un 75% el presidente Kuczynski es poco o nada eficaz en la lucha contra la corrupción. ¿Qué tendría que hacer el mandatario para revertir esto?
Para liderar un proceso anticorrupción eficaz se requiere un liderazgo ético al máximo nivel. Un buen ejemplo fue el ex presidente Valentín Paniagua que puso en el tope de su agenda liderar esta lucha. Fue lo contrario a los últimos presidentes. Dos de ellos están en prisión, un tercero va a ser extraditado y hay dos ex presidentes más sometidos a investigación, incluido el propio presidente Kuczynsnki. Por eso a él se le ha demandado que cumpla con las promesas electorales de un liderazgo en la lucha contra la corrupción. Pero me parece que el tema anticorrupción no esta en su ADN, no le da la importancia que debiera o no entiende las graves consecuencias que la corrupción genera.

Foto: Agencia Andina

29/09/2017

¡Despertemos ya!, por Jorge Medina

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  • Por Jorge Medina, presidente de Proética
  • Columna publicada en el diario El Comercio

El 52% de peruanos ubica a la corrupción como uno de los principales problemas del país, solo 5% por debajo de la delincuencia (57%) y muy por encima del consumo de drogas (27%), según la encuesta nacional de Proética presentada ayer. A pesar de que el Perú tiene dos presidentes presos, uno fugado y otro investigado, el incremento en la percepción de la corrupción es tan solo seis puntos porcentuales más con respecto a la encuesta del 2015.

Llama poderosamente la atención que, a pesar de que el 75% dice estar informado sobre el Caso Lava Jato, apenas el 52% de la población señale a la corrupción como el principal problema del Perú. Ese porcentaje tampoco se acerca al 64% que asegura estar muy informado o algo informado de los casos de corrupción. Por si fuera poco, la corrupción de funcionarios y autoridades –considerada como el principal problema del Estado– apenas aumentó en un punto, de 61% a 62%, entre el 2015 y este año.

Estos resultados deben llevarnos a recapacitar seriamente sobre lo que está pasando hoy en el Perú: lamentablemente, la corrupción se ha normalizado. No nos indigna que Odebrecht haya admitido haber pagado US$29 millones en coimas entre el 2001 y el 2016 en el país. No nos sorprende que tengamos 67 gobernadores y ex gobernadores investigados y procesados por corrupción. No nos preocupa que 102 alcaldes y ex alcaldes provinciales ni que 428 alcaldes y ex alcaldes distritales también lo estén, según la Procuraduría Pública Especializada en Delitos de Corrupción. ¡Todo esto nos parece de lo más normal! Es más, casi la mitad de los que admitieron haber pagado una coima explica que lo hizo porque “si uno no paga, las cosas no funcionan”, y el 20% porque coimear ya “es como una costumbre”.

Así las cosas, la corrupción seguirá impidiendo nuestro progreso, no solo económico, sino social y humano, alimentando la desconfianza hacia el Estado y agudizando la existente entre nosotros. La mayoría de peruanos cree que la gran corrupción reduce su confianza en el Estado y prácticamente todos los encuestados (94%) aseguran que no se puede confiar en nadie o en casi nadie. Esta desconfianza generalizada hace que el ciudadano no sepa distinguir entre un peruano corrupto y uno honesto, que la transparencia sea vista como una traba y el Estado como un enemigo al que se le puede sacar ventaja con, por ejemplo, una coima.

¿Podemos esperar un cambio? Por sí solo, no. Pues apenas un 48% dice que no votaría por candidatos o partidos políticos corruptos. ¡Menos de la mitad del país! Y quizás en realidad sea una cifra mucho menor, ya que hay un 22% que cree que no se debe condenar a funcionarios corruptos si es que hacen obras que beneficien a la población, casi 10 puntos más que en el 2015.

¿Qué hacemos entonces? No queda otra cosa que asumir un verdadero compromiso y liderazgo, al más alto nivel. Ciertamente encarnado en el presidente de la República, como lo señala el 44% de la población que cree que es él quien debe liderar esta lucha. Pero para que el Perú despegue, tal liderazgo debería ser ejercido también por toda la clase dirigente del país, no solo por las autoridades.

La verdad sea dicha, los empresarios, la academia y hasta la sociedad civil hemos tenido un rol sorprendentemente pasivo –casi inexistente– ante los recientes hechos de corrupción. Requerimos despertar a un nivel superior de consciencia que nos haga ver que sin nuestro involucramiento personal –que deje atrás el lenguaje políticamente correcto y pase de la declaración a la acción– estaremos poniendo en serio riesgo nuestra democracia, comprometiendo nuestro desarrollo.

Hace poco, los principales empresarios chilenos firmaron un acuerdo para impulsar una cultura de integridad y ética empresarial. En Paraguay, los jóvenes han conformado una organización no gubernamental –Reacción Paraguay– para promover la transparencia en el manejo de las instituciones públicas. En Eslovenia, el capítulo de Transparencia Internacional ayudó a implementar un curso anticorrupción en los currículos educativos de las escuelas.

¿Qué esperamos en el Perú? ¿Qué más tiene que pasar para que reaccionemos ante la corrupción que nos está destruyendo? ¡Despertemos ya!

Ilustración: Víctor Aguilar

28/09/2017

Crítica evaluación de la ciudadanía frente a la lucha contra la corrupción en el Perú, revela estudio de Proética

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A un año de asumir el gobierno, la ciudadanía califica críticamente la eficiencia del gobierno del presidente Pedro Pablo Kuczynski para combatir la corrupción. Un 75% de peruanos considera que en este periodo se ha actuado de forma poco o nada eficaz, según la encuesta nacional sobre corrupción presentada por Proética este miércoles 27 de setiembre en el auditorio de la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC).

Si bien la corrupción se mantiene como el segundo problema más grave que enfrenta el país, después de la delincuencia, la brecha con esta se ha acortado notoriamente con respecto al año 2015, cuando se realizó la anterior medición. La delincuencia bajó 5 puntos, de 62% a 57%, mientras que la corrupción aumentó 6, de 46% a 52%, confirmando su tendencia al alza. Es también significativo que al interior del país, la corrupción se ubique ya en el primer lugar (53%), 3 puntos por encima de la delincuencia.

El protagonismo que ha tenido el caso Lava Jato es innegable. Un 61% de los encuestados está de acuerdo en que el principal impacto negativo tiene que ver con la pérdida de confianza en el Estado, mientras que un 49% señala que este caso ha ocasionado un menor crecimiento económico y un 37% considera que se están haciendo obras públicas de peor calidad.

Además, el impacto que habría tenido el caso sobre la percepción de corrupción de los anteriores gobernantes es fuerte: 35% considera al gobierno de Alan García como el más corrupto, por encima del periodo de Fujimori (23%). Un 22% señala al gobierno de Humala y 15% al de Toledo.

A pesar de esta medición negativa, los peruanos opinan que la mejor forma de luchar contra la corrupción es denunciarla (54%) o no votar por candidatos corruptos (48%). Además, un 22% estaría dispuesto a unirse a una organización anticorrupción y un 19 % hablar sobre el tema en redes sociales.

Un 55% están de acuerdo con que los miembros de la Comisión de ética del Congreso de la República no sean parlamentarios, sino personas externas.

Considerada como una de las mediciones nacionales más relevantes respecto a este tema, la encuesta de Proética ha sido aplicada, como en anteriores oportunidades, por Ipsos Perú y ha sido posible gracias al apoyo de la Universidad del Pacífico, la Pontificia Universidad Católica del Perú, la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas, la Universidad Peruana Cayetano Heredia y la Universidad Antonio Ruiz de Montoya.

La muestra consistió de 1314 peruanos y peruanas mayores de 18 años de la zona urbana de Lima y otras 17 ciudades del país, entre el 20 y 30 de agosto de 2017.  El margen de error fue de +/- 2.7%.

Descarga la Décima Encuesta Nacional sobre Corrupción aquí.

 

Links relacionados a la Décima Encuesta Naciona sobre Corrupción:

27/09/2017

“Escuchar a los jóvenes”, por Jorge Medina

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  • Por Jorge Medina, presidente de Proética.
  • Publicado en el suplemento Día1 del diario El Comercio

Los jóvenes del mundo tienen algo importante que decirnos. El 47% de ellos opina que la corrupción y falta de transparencia son los mayores problemas de sus países –por encima de la inequidad (38%) y la falta de oportunidades económicas (30%)– y el 49% responsabiliza a la corrupción de ser el principal motor de la desigualdad, según la reciente encuesta Global Shapers del Foro Económico Mundial, hecha a jó- venes de entre 18 y 35 años en 186 países. Por eso, no sorprende que el 52% de ellos no confíe en sus gobiernos, sobre todo en América Latina.

El abuso de poder es lo que más frustra a los millennials, especialmente a los latinoamericanos (78%). Más de la mitad de los jóvenes del mundo cree que luchar contra la corrupción es la mejor manera en la que los gobiernos pueden demostrar transparencia y rendición de cuentas.

“Los jóvenes señalan que la integridad es la cualidad más importante en un líder y priorizan la lucha contra la corrupción.”

Estas respuestas guardan estrecha relación con los valores que los jóvenes buscan en los líderes: el 47% dice que la integridad es la cualidad más importante que debe tener un empleador o gobernante, mucho más que obtener buenos resultados o que proteger el futuro de su país y el mundo.

Todo esto revela cómo las nuevas generaciones no solo repudian la corrupción, sino que la asocian a una desigualdad que les resulta inaceptable, pues saben que no podrán alcanzar su potencial sin que exista una sociedad más justa e inclusiva, lo que equivale a un mundo libre de corrupción.

Todos –autoridades, polí- ticos, empresarios, medios, académicos– tenemos la gran oportunidad de escuchar a la juventud y ayudarla a ser protagonistas del cambio que reclama el país: transitar de una cultura de transgresión a una de integridad.

Foto: CADE Universitario

25/09/2017

Proética presentó nueva encuesta nacional sobre corrupción en el Perú

Proética, capítulo peruano de Transparencia Internacional, presentó este miércoles 27 de setiembre los resultados de la Décima Encuesta Nacional sobre Percepciones de la Corrupción en el Perú. Este instrumento sondea las opiniones y actitudes de los peruanos y peruanas ante la corrupción.

Considerada como una de las mediciones nacionales más relevantes respecto a este tema, la encuesta de Proética de este año ha recogido la reacción de la opinión pública ante el caso Lava Jato, la evaluación del desempeño del gobierno de Pedro Pablo Kuczynski en la lucha contra la corrupción, el rol del sector privado y la relación entre corrupción e informalidad; además de revelar nuevos datos sobre temas que han sido recogidos recurrentemente desde la primera edición (2002), como la corrupción como problema del país, las instituciones percibidas como las más corruptas, la tolerancia ciudadana ante la corrupción y el pago de coimas a funcionarios públicos, entre otros.

La presentación de los hallazgos estuvo a cargo de Alfredo Torres, presidente de Ipsos Perú, empresa que aplicó la encuesta, y fueron analizados por un panel de destacados expertos que estuvo conformado por el Director Periodístico del diario El Comercio, Fernando Berckemeyer, la periodista Patricia del Río, Jaris Mujica del Laboratorio de Criminología de la Pontificia Universidad Católica del Perú y la presidenta de Empresarios por la Educación, Mariana Rodríguez Risco. El panel fue moderado por el Director Ejecutivo de Proética, Walter Albán y las palabras de cierre estuvo a cargo del ex presidente de Transparencia Internacional, José Ugaz.

Este evento fue organizado por Proética con el apoyo de la Universidad del Pacífico, la Pontificia Unviversidad Católica del Perú, la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas, la Universidad Peruana Cayetano Heredia y la Universidad Antonio Ruiz de Montoya.

Puede descargar la Décima Encuesta Nacional sobre la Corrupción aquí.

Décima Encuesta Nacional Sobre Percepción de la Corrupción en el Perú 2017 by Proética on Scribd

Base de datos

Como en ediciones anteriores, ponemos a disposición de la comunidad académica y de personas interesadas en general la base de datos de nuestra encuesta nacional. Puede descargar libremente la base de datos para SPSS aquí.

La Encuesta Nacional de Percepciones sobre Corrupción 2017 de Proética, capítulo peruano de Transparencia Internacional se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.

Nota: En esta última encuesta se incluyó un grupo de preguntas encargado por el equipo de colaboradores de la Universidad del Pacífico. Los datos correspondientes a estas preguntas no están incluidos en la base de datos que se comparte. También se incluyó dos preguntas sobre conocimiento y valoración del trabajo de nuestra institución. Por ser de interés interno, tampoco están incluidos estos datos en esta versión libre.

Nota de prensa

CRÍTICA EVALUACIÓN DE LA CIUDADANÍA FRENTE A LA LUCHA CONTRA LA CORRUPCIÓN EN EL PERÚ, REVELA ESTUDIO DE PROÉTICA

Videos

Palabras de bienvenida a cargo del presidente de Proética, Jorge Medina

Presentación de resultados a cargo del presidente de IPSOS, Alfredo Torres

Comentarios del panel de expertos sobre los resultados de la Décima Encuesta Nacional sobre Corrupción

Palabras de cierre a cargo del ex presidente de Transparencia Internacional, José Ugaz

22/09/2017

Décima Encuesta Nacional sobre Percepciones de la Corrupción 2017

La Décima Encuesta Nacional sobre Corrupción se aplicó del 20 al 30 de agosto del 2017 por Ipsos Perú, a una muestra 1314 peruanos y peruanas mayores de 18 años de la zona urbana de Lima y otras 17 ciudades del país. El margen de error fue de +/- 2.7%.

Nota: En esta última encuesta se incluyó un grupo de preguntas encargado por el equipo de colaboradores de la Universidad del Pacífico. Los datos correspondientes a estas preguntas no están incluidos en la base de datos que se comparte. También se incluyó dos preguntas sobre conocimiento y valoración del trabajo de nuestra institución. Por ser de interés interno, tampoco están incluidos estos datos en esta versión libre.

Puedes descargar la encuesta completa aquí:

También puedes descargar la base de datos de la encuesta aquí:

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El Director Ejecutivo de Proética, Walter Albán, espera que el nuevo Gabinete Ministerial, presidido por Mercedes Aráoz, tenga una actuación decidida en temas centrales como la lucha contra la corrupción en el país y establezcan, a partir de ello, una indispensable alianza con la sociedad civil.

“Es fundamental que estos cambios no se limiten a renovar personas, sino que den lugar a una actuación decidida en temas centrales, como los de la reactivación económica, la seguridad ciudadana y la lucha contra la corrupción”, señaló Albán en la última edición de la Voz de Proética.

Sostuvo que el gobierno del presidente Pedro Pablo Kuczynski tiene, una vez más, la oportunidad de recuperar el respaldo popular y establecer vínculos con la sociedad civil para poder cumplir con compromisos claves como la Autoridad Autónoma para la Transparencia, la recomposición del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) y las recomendaciones alcanzadas por la Comisión Presidencial de Integridad.

“El camino recorrido durante estos 14 meses de gobierno, hace evidente la urgencia de establecer esa alianza, que no ha sido posible concretar, dada la convicción mostrada para ejercer un efectivo liderazgo en este campo”, indicó.

Por ello, precisó que para revitalizar la acción del gobierno, es vital recuperar la confianza de la ciudadanía y la mejor manera de lograrlo es a través de la lucha contra la corrupción, que ha penetrado la política y nuestra débil institucionalidad.

“Ha llegado el momento de rectificar actitudes, pero también el de retomar rumbos y asumir con energía el reto de limpiar la política y el escenario institucional en el país”, finalizó.

18/09/20117