Pronunciamiento de Proética sobre caso Rafo León

Periodista Rafo León. Foto: Perú 21

Este martes, la magistrada Susan Coronado Zegarra, del 42º Juzgado Penal de Reos Libres de Lima, hizo conocer su decisión de reservar el fallo condenatorio contra el periodista Rafael León, acusado de difamación por la ex editora de El Comercio, Martha Meier.

La misma Jueza además, ordenó que el periodista se someta a una serie de reglas de conducta durante un año, comprendiendo en ellas las de no variar de domicilio, así como acudir mensualmente a firmar un cuadernillo de registro. Asimismo, fijó en 6 mil soles el pago que León deberá abonar por concepto de reparación civil.

Al respecto, Proética, capítulo peruano de Transparencia Internacional, deplora la decisión de la citada magistrada, que constituye un pésimo precedente en lo que atañe al ejercicio de la libertad de expresión y de opinión en el Perú. En efecto, Rafo León no hizo otra cosa que brindar una opinión, refiriéndose a una publicación hecha por la demandante días antes.

En consecuencia, nuestra institución hace un llamado a la ciudadanía, a fin de no solamente solidarizarse con el periodista víctima de este atropello, sino a considerar la trascendencia del caso, que constituye una real amenaza a los derechos fundamentales de cada peruano o peruana, así como a la vigencia de los principios democráticos que inspiran a todo Estado de Derecho. En el mismo sentido, esperamos una rectificación de lo ocurrido al interior de propio Poder Judicial, independientemente de que, en paralelo, el Congreso de la República de curso a un debate que permita derogar las figuras delictivas que han dado pie a tan desproporcionada, injusta e inconstitucional decisión.

Presidente de TI, Jose Ugaz, expone sobre el efecto de la gran corrupción en el mundo

El lunes 04 de abril, Proética en alianza con la Universidad del Pacífico realizó el taller “¿Por qué la corrupción debe importarnos más? “, evento que contó con la participación del presidente de Transparency International, Jose Ugaz.

Durante su exposición, Ugaz habló sobre el efecto que provoca la corrupción a gran escala en las sociedades más pobres del mundo y los desafíos que tanto la sociedad civil como las instituciones gubernamentales deben afrontar para acabar con este flagelo social.

Proética presentó los resultados de la auditoría ciudadana realizada a las campañas proselitistas

El jueves de la semana pasada, Proética presentó los resultados del “Hackeo al Financiamiento Político: Auditoría Ciudadana de Gastos de Campaña”. Al respecto, el Director Ejecutivo de esta institución, Walter Albán, señaló que este reporte permitirá comparar la información entregada por las organizaciones políticas ante la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) y conocer si tales organizaciones han sido transparentes al momento de rendir cuentas ante el citado organismo electoral.

“Sabemos que el financiamiento de las organizaciones políticas constituye una preocupación creciente en el Perú, y expresa un delicado problema al cual debemos hacer frente. Una manera de lograr esto, es precisamente a través de un seguimiento detallado a las actividades realizadas por estas organizaciones en las diferentes regiones del país, a fin de recabar información acerca de los recursos efectivamente invertidos por cada una de ellas, durante la campaña electoral, allí donde difícilmente sería posible hacerlo para la propia ONPE”, indicó Albán, en la última edición de La Voz de Proética.

Fueron más de 150 voluntarios y voluntarias que se encargaron de seguir los mítines, pasacalles y actividades pro fondos que se llevaron a cabo en 10 ciudades del país, durante la primera vuelta electoral.

Por ello, Albán destacó la labor realizada por este equipo de ciudadanos y ciudadanas, que no solo dedicaron durante varias jornadas parte importante de su tiempo, sino que lo hicieron con el mayor compromiso y seriedad para garantizar un resultado exitoso.

“Esto es vigilancia ciudadana, y es así como podemos hacer más sólida nuestra democracia. Sólo de esta manera estaremos seguros de superar los actuales retos que el Perú tiene por delante”, sostuvo.

Finalmente, resaltó que esta iniciativa contó con el apoyo de la cooperación internacional a través de los proyectos “23 Millones” y “Candidatazos” de la Unión Europea y USAID, respectivamente, y fue ejecutada en colaboración con la Asociación Civil Transparencia e Idea Internacional.

2 de mayo de 2016

Presentación del informe: “Hackeo al Financiamiento Político”

En el mes de abril, Proética presentó el informe preliminar del Hackeo al Financiamiento Político, una auditoría ciudadana realizada a los gastos de campaña de los candidatos presidenciales durante la primera vuelta electoral. Este trabajo fue realizado por un grupo de voluntarios en coordinación con el equipo de 50+1.

28/04/2016

Proética se pronuncia sobre caso de periodistas Fernando Valencia y Rafo León

El Director Ejecutivo de Proética, Walter Albán, consideró preocupante el caso de los periodistas Fernando Valencia y Rafael León, el primero sentenciado por difamación y el segundo a punto de ser condenado por el mismo delito, no obstante que, en ambos casos, no han hecho sino ejercer su libertad para expresarse y brindar opinión.

Como se sabe, Valencia fue sentenciado a un año y 8 meses de prisión suspendida, bajo el cargo de haber publicado en una portada de Diario 16, publicación de la que era director en ese entonces, declaraciones del presidente del Perú, Ollanta Humala, en contra del ex mandatario Alan García.

En el caso de León, éste fue denunciado por escribir una columna de opinión en la revista Caretas, en la que comentó un artículo de la entonces editora del diario El Comercio, Martha Meier Miró, cuyo texto contenía fuertes críticas a la ex alcaldesa de Lima, Susana Villarán.

Al respecto, Walter Albán consideró que estos hechos tienen una transcendencia que va más allá de las personas afectadas, Valencia y León, toda vez que no solo se trata de la vulneración de sus derechos fundamentales, con el agravante de que se trata de profesionales del periodismo, sino porque, además, “nos encontramos una vez más ante la evidencia de una instrumentalización del Poder Judicial para impedir la crítica”.

“Resulta inaceptable que este tipo de utilización de un Poder del Estado, pueda finalmente afectar la democracia y el libre ejercicio de los derechos ciudadanos. Por eso tenemos que reaccionar”, señaló en la última edición de La Voz de Proética.

“Más allá de impedir de que se consumen las condenas a estos periodistas, se trata de que nadie en el país tenga que encontrarse en riesgo de perder su libertad o patrimonio como consecuencia de expresar una opinión crítica”, agregó.

En ese sentido, Albán ser sumo al parecer de quienes vienen planteando la necesidad de revisar la vigencia de estos delitos de calumnia o difamación, ya que vienen siendo utilizados con mucha frecuencia para afectar derechos ciudadanos.

“Estos atropellos deben motivar una reacción ciudadana y las autoridades, en este caso el Congreso de la República, deben proceder para impedir que nuestra democracia se vea afectada por tan graves arbitrariedades y excesos de poder”, finalizó.

25 de abril de 2016

Relaciones peligrosas, por Walter Albán

(Fuente: El Comercio).- Tras las tensiones, sorpresas e incertidumbres que este accidentado proceso electoral trajo consigo, por fin sabemos entre qué candidatos debemos escoger el 5 de junio. No pocas dudas restan sin embargo sobre la manera como, quien finalmente resulte elegido, habrá de enfrentar los problemas que la ciudadanía ha venido señalando como los que afectan de forma más alarmante su calidad de vida: la inseguridad y la corrupción.

Al respecto, al margen de la mínima posibilidad que tuvimos para conocer en general los planes de gobierno de cada postulante, resulta crucial revisar las escasas y no siempre consistentes propuestas sobre los temas antes señalados. Así, atendiendo aquellas que han sido expresadas a nombre de las organizaciones políticas participantes en la contienda, constatamos que su formulación ha carecido de una perspectiva integral, capaz de asumir, por ejemplo, la cada vez más evidente vinculación entre el exponencial incremento de la corrupción y el de la criminalidad en el país.

En efecto, el notable crecimiento experimentado por nuestra economía durante más de una década, que ha contribuido sin duda a reducir significativamente los niveles de pobreza, ha ido aparejado sin embargo, dada nuestra profunda debilidad institucional, del incesante desarrollo de una economía ilegal, sustentada en actividades como el narcotráfico, lavado de activos o minería y tala ilegal, entre otras, que han dotado de ingentes recursos a sendas mafias del crimen organizado. En este contexto, tales mafias han desarrollado una eficaz estrategia de penetración del Estado, valiéndose en buena medida de la debilidad de las organizaciones políticas.

Así, los actuales niveles de corrupción en el aparato estatal registran una magnitud inédita y, si bien atraviesan al conjunto de sus instituciones, incluido el propio Congreso de la República, resulta particularmente preocupante que hayan alcanzado grados extremos en entidades claves para la lucha contra la criminalidad, como ocurre con la Policía Nacional, el Poder Judicial o el Ministerio Público y, en relación con estos últimos, también el Consejo Nacional de la Magistratura (CNM). Al respecto, es equivocado sostener que se trata de un problema menor o aislado en cada caso, porque nos encontramos ante un mal que ha ido enquistándose y extendiéndose durante años en estas organizaciones, al punto de perforar las bases mismas de su estructura institucional.

Es entonces indispensable realizar un esfuerzo monumental para revertir esta situación y ello demanda, por cierto, madurez y sentido de responsabilidad de la clase política para construir, por encima de los resultados electorales y de la cuota de poder que lleguen a alcanzar en el próximo Congreso, los necesarios consensos para diseñar políticas públicas eficaces, dirigidas a superar exitosamente los actuales desafíos.

Es bajo esta perspectiva que deben ser abordadas medidas indispensables para nuestra recuperación institucional, como la de reformular la actual composición del CNM, orientando decididamente su actividad a encarar los graves problemas de corrupción, ineficiencia, lentitud, provisionalidad y desconfianza ciudadana, que afectan a nuestro sistema judicial.

Asimismo, el Congreso no puede continuar dilatando la aprobación de normas que otorguen facultades a la Unidad de Inteligencia Financiera para acceder a la información tributaria y bancaria con que combatir el lavado de activos, así como la competencia de la SBS para supervisar a las cooperativas de ahorro y crédito, que hoy actúan sin ningún control.

Cuestiones como la elección del contralor a base de un concurso público, la independencia de las procuradurías anticorrupción, la creación de una autoridad autónoma para la transparencia y el gobierno abierto, así como una nueva y efectiva ley de gestión de intereses, son solo algunas de las propuestas planteadas en el foro de candidatos a la presidencia que organizó Proética en enero. Pero todo ello, para su viabilidad, demanda sumar esfuerzos, definir una estrategia en común y la adopción de acuerdos mínimos, para convertir esos contenidos en verdaderas políticas de Estado.

A lo anterior debemos añadir el rol clave de la vigilancia ciudadana, a través de una activa participación de la sociedad civil en la cruzada a emprender. Sin ella, como lo ha demostrado más de una vez nuestra historia reciente, no habrá consensos ni rectificación de errores, sino solo un juego político en la superficie, en tanto los cimientos del país continuarán deteriorándose hacia una total descomposición.