Jorge Medina Méndez: “La transparencia es el antídoto contra la corrupción”

(Por Mariella Balbi/Perú21). El presidente de Proética, Jorge Medina, analiza la situación de la lucha anticorrupción en nuestro país. Medina, contador de profesión, esperaba que en el mensaje presidencial el mandatario expresara su enérgica convicción en la lucha anticorrupción.

La Fiscalía de la Nación criticó que en el mensaje del 28 de julio el presidente no hiciera un pronunciamiento sobre la lucha anticorrupción. ¿Como miembro de Proética considera que fue una omisión?

Creo que sí, faltaron temas concretos y cómo atacarlos. No hay el liderazgo ni la energía necesarios respecto a políticas públicas para combatir la corrupción por parte del gobierno. No digo que no haya el deseo. Una cosa es no querer combatir la corrupción y otra no saber o todavía no encontrar el camino. Estamos más cerca de lo segundo. Los ciudadanos le piden al gobierno y al Congreso que ataquen este problema, unido a ello está la inseguridad ciudadana. La corrupción es el resultado de otros males y no la causa, como el mal ejercicio de la política, el sistema electoral que lo permite y otros.

¿En la Comisión Anticorrupción (CAN), que integra Proética, se plantean estos temas?

Es una iniciativa muy interesante, pero no funciona como se esperaría.

¿Es una entelequia entonces?

No tiene el presupuesto necesario ni la estructura administrativa que haga que esto funcione, aunque están todos los poderes del Estado. Cuenta con una secretaría general pero no ha estado funcionando bien. Tampoco tiene iniciativa legislativa. Se reúne muy poco y no tiene cosas concretas. Podría funcionar.

Sin embargo, separaron al ex contralor de la CAN.

No fue la primera vez, hace tres años nosotros separamos al ex fiscal Ramos Heredia. Con el ex contralor, Proética pidió que se inhiba de asistir hasta que se aclarara su situación

¿Fue un adelanto de opinión?

No, fue el ejercicio de un liderazgo claro.

El ex contralor dijo que descargó las observaciones en su presentación en el Congreso. Mencionó que vendió ocho carros en cuatro años entre él y su esposa.

Están las evidencias, realizó actividades prohibidas, empresariales. No resiste mucho análisis lo de la flota vehicular familiar. Las grabaciones que le imputaron no están demostradas. Pero no reveló sus actividades en su declaración jurada.

El actual contralor tiene una denuncia fiscal por colusión que aún no se resuelve.

No conozco el caso. No puedo opinar. No sé si son comparables las denuncias. El ex contralor realizó actividades empresariales. Alguien con una investigación fiscal es inocente hasta que no se pruebe lo contrario.

¿Cómo lee usted el caso Lava Jato?

– Lava Jato es la manifestación de una relación perversa en el mal ejercicio de la política y de los negocios. Ocurre en ambientes donde no hay instituciones fuertes.

En toda América Latina.

En algunos países con mayor énfasis que en otros. Se manifiesta porque Odebrecht se declara culpable en EE.UU. Si no se hubiera descubierto, qué habría pasado. El problema es lo que causa Lava Jato. ¿Por qué no ocurre en todo el mundo? Porque las instituciones funcionan.

Con la Interoceánica, Contraloría advirtió al gobierno de Toledo que no se podía contratar con Odebrecht y este emitió una disposición legal que superaba eso.

¿La Interoceánica era la obra más urgente? El problema es que el país no tiene un plan de infraestructura coordinado, predecible, por ejemplo en el Acuerdo Nacional, donde los peruanos digan: estas son las obras que necesitamos.

¿En qué país el Acuerdo Nacional propone obras de infraestructura? Es el Ejecutivo.

Puede hacerlo, pero debe tener un plan de infraestructura de largo plazo. Es una de las medidas que recomendamos en la Comisión Presidencial de Integridad (CPI).

¿Lo practica este gobierno?

No. Propusimos cien medidas, el 30% las implementó con mayor o menor éxito el Ejecutivo, el resto corresponde al Congreso, lo más importante, las reformas.

De ese 30%, ¿qué es lo más destacable?

Recomendamos la Autoridad Autónoma para la Transparencia y Acceso a la Información Pública. Desafortunadamente se incluyó en la estructura del Ministerio de Justicia, restándole autonomía. Si uno pide información pública y no se la dan, es ilegal, es importantísima. Otro punto importante fue la muerte civil y la declaración jurada de intereses. El presidente, los ministros y algunos congresistas la presentaron hasta el 31 de enero.

¿Se consignó por ejemplo que la hermana del premier trabaja en la empresa de Chinchero?

No lo sé. Pero es una medida importante porque se puede ver si hay conflicto de intereses en lo que se está normando.

La actual ministra del Midis tiene una denuncia penal de Contraloría por el tema Chinchero, ¿fue prudente nombrarla?

Sin duda es un tema que hay que ver con cuidado. Como dice el apóstol Pablo, “no todo lo lícito es provechoso”. Pese a ello tiene cualidades, no necesariamente es lo mejor para el interés del país. Las consecuencias y efectos que producen su nombramiento probablemente distraen y no conviene estar centrado en esto cuando se puede tener otros profesionales de igual experiencia y valía. La hermana del premier ya trabajaba años en Kuntur Wasi, ¿le dices que tiene renunciar? Hay que ser cuidadoso y respetar derechos. Creo que la discusión no va por ese lado, sino si el contrato era conveniente para el Estado.

Se luchó tanto por la adenda al contrato y al final este se canceló.

Ha sido un manejo lamentable.

Se le dio la razón al Congreso y a Contraloría, esta recomendó volver al contrato original y negociar, cancelando la adenda.

El manejo del caso Chinchero fue desacertado, innecesariamente cruento, dos ministros fuera del gabinete. Esperemos que el gobierno aprenda de estas lecciones.

¿Hay transparencia en los actos y decisiones de este gobierno? ¿Observa conflicto de intereses?

Es una pregunta muy amplia difícil de contestar con un sí o un no. Creo que el Estado peruano no funciona de forma transparente. La transparencia es el principal antídoto contra la corrupción. Las instituciones públicas deben rendir cuentas, incluida la Contraloría, quién la controla, ojalá se reforme el sistema.

Cada gobierno reforma.

Le corresponde al Congreso. El contralor tiene razón en reformar su institución. ¿Cuáles son los casos de corrupción detectados por Contraloría?

En 2004, la Contraloría alertó sobre Odebrecht, en la gestión de Matute se emitieron informes sobre Línea 2, Chinchero, Panamericanos, Línea Amarilla.

En los casos de megacorrupción que hemos visto en las regiones, Contraloría no estuvo. Las reformas de administración de justicia están en manos del Congreso.

Pero este no gobierna, el Ejecutivo propone al Congreso.

Es función del Congreso legislar y fiscalizar. El Ejecutivo ejecuta la ley. El Consejo Nacional de la Magistratura requiere resolver los problemas que tiene. El proyecto presentado por el presidente el 28 de julio es un despropósito. Logra injerencia política en la administración de justicia.

¿Está mal asesorado?

Habrá que preguntárselo a ellos. La Constitución permite 9 miembros en el CNM. Hay dos ausentes actualmente, el sector productivo y algún representante de los trabajadores. Se debe reformar la elección de los consejeros. Probablemente, con respeto, un odontólogo no tendrá las mismas capacidades que un abogado o un sociólogo. Debe existir un concurso de méritos. Y si es elección por colegios profesionales, que participe el JNE para darle transparencia. Si un gobierno tiene mayoría en el Congreso, ya sabemos que sería el CNM, se le entregaría al régimen de turno la administración de la justicia. Lo bueno es que este proyecto ha abierto un espacio de discusión a otro nivel. No creo que la ciudadanía va a aceptar cualquier reforma. El proyecto del Ejecutivo borra a la sociedad civil, no creo que prospere.

Usted es contador, ¿cómo funcionó la corrupción de Lava Jato, la modalidad fue bien pensada, qué le indica?

Es el mal ejercicio del poder que no tiene un contrapeso en las instituciones.

¿Pero cuál es la llave del ‘éxito’ de esta corrupción? Crear una contabilidad paralela, apuntar a la infraestructura.

Se nos pasó a todos. O no vimos o no quisimos ver. En el mundo de los negocios, académico, acaso no se decía que Odebrecht y algunas otras empresas brasileñas eran unos zamarros y tramposos. Qué falló, la sanción social. No todos iban a los cócteles y reuniones de Odebrecht, y aunque tarde, algunas organizaciones las rechazaron.

Oiga, periodistas, candidatos, funcionarios se relacionaron con Odebrecht.

Por eso necesitamos sanción moral, social.

¿Se fraguó la mecánica de corrupción de Odebrecht con la Interoceánica? El gobierno de Toledo en su mayoría se plegó para sacar adelante el proyecto.

No sé si las malas prácticas de Odebrecht comenzaron antes.

Por lo que sabemos, arrancó con la Interoceánica, se movilizó al Ejecutivo.

La pregunta que habría que hacer es si los estudios de prefactibilidad ameritaban realizar la Interoceánica. No se hicieron y hoy tampoco se hacen, pese a que indican la viabilidad del proyecto. Hasta hoy hay mucho apuro y al final vienen las adendas. Estas no deberían ser un sinónimo de corrupción. Lo que tenemos que lograr es que estén plenamente justificadas gracias a que hay un buen estudio de prefactibilidad.

La respuesta de este gobierno al caso Odebrecht fue el decreto 003. ¿Es adecuado?

Probablemente mejor tenerlo que no. Si su ejecución origina cortar la cadena de pagos, entonces tenemos un problema. Cuando ve las discusiones sobre las ex procuradoras que impiden la venta de Olmos y no se puede conseguir dinero para pagar, lo que se tiene que lograr es que este dispositivo salvaguarde el pago de las compensaciones.

¿Qué detuvo la ex procuradora Katerine Ampuero? Ella pidió la inhibición del 30% de una de las empresas de Odebrecht y la medida cautelar se podía levantar cuando la empresa tuviera una venta real.

No conozco en detalle el caso de las procuradoras. Hay una ruptura de cadena de pagos en Olmos.

Antes de que se pidiera la inhibición, ¿qué se cautela, la cadena de pagos o los intereses del Estado?

Por supuesto cautelar sus intereses, pero también velar por los trabajadores.

El decreto 003 estipula que quien cobra es el Estado, se crea un fideicomiso.

Probablemente las cosas se pueden mejorar. En concreto se podría tomar la administración de Olmos y que las obras no se paralicen.

Eso no le corresponde a las ex procuradoras si no al gobierno. ¿Su expectoración fue ponderada?

No ha sido el mejor manejo.

¿La salida de las procuradoras está justificada?

Difícil darle una opinión porque no conozco los detalles. La comunicación no ha sido buena. La Procuraduría y la Fiscalía deben trabajar de manera coordinada, dejar el secretismo, debe haber mayor información.

¿La Comisión Anticorrupción no exige a la Fiscalía conocer el acuerdo con Odebrecht?

Varios miembros se lo han pedido al fiscal de la Nación, pero este alude a la reserva de la investigación. Es un error, hay ciertas cosas que deberían saberse sin entorpecer.

En su opinión, ¿Olmos está en venta? Lo desconocían las procuradoras y la ministra.

No lo sé.

¿Las ex procuradoras cumplían con su labor de defender al Estado?

No le puedo dar todos los detalles, me encantaría opinar, el manejo no ha sido bueno. Y no avanzamos en las cosas. El nuevo procurador trabajará en las misma condiciones, supongo tendrá la misma autonomía. Si el gobierno protege el interés del Estado y al mismo tiempo no perjudica la cadena de pagos, esa es la solución. Odebrecht ha cometido corrupción.

Siempre y cuando haya una venta, de momento es un fantasma.

Habrá que decir cómo son las cosas.

Lo absurdo es que las dos ex procuradoras ‘pagaron pato’. ¿Hay transparencia?

Hay un manejo inadecuado.

¿Le parece normal que de 54 empresas que tiene Odebrecht en Perú solo esté encausada judicialmente una, la de la Interoceánica?

Es extraño, debe tener una explicación, no la conozco.

Según el economista Juan Mendoza, sería mejor establecer un monto total de reparación civil. Panamá estableció US$220 millones.

Eso debe tener un sustento. Hay que ver qué ocurre en otras latitudes. No tenemos cuantificado el daño.

Le corresponde al Ejecutivo ponderarlo. ¿Por qué no lo hace?

Si le corresponde, no sé por qué no lo hace. En función del daño se establece la reparación que debe ser cobrable. Por lo menos no es público que el gobierno esté actuando en ese sentido.

¿Le sorprende que la Fiscalía no haya involucrado en su investigación a empresas nacionales relacionadas con Odebrecht?

Entiendo que sí están investigándolas, es un manejo reservado.

La ex procuradora Ampuero lo pidió pero no prosperó.

Es cierto. Yo creo que las investigaciones deben ser absolutas y a todos.

¿La salida de las ex procuradoras evidencia una falta de voluntad de luchar contra la corrupción?

No puedo hablar de la voluntad, tendría que ver qué hay dentro de la cabeza de los líderes del gobierno. No me quiero circunscribir a la salida de las procuradoras. No es el evento más importante, lo crucial es que no estamos yendo a las causas. Hubiera esperado del mensaje del presidente una reforma del financiamiento electoral y otras más. Hubo una omisión, el presidente debe encarnar el combate de la lucha contra la corrupción. Ponerle tanta energía como lo hace con el tema del agua.

¿Proética considera que la prisión preventiva de Ollanta Humala y Nadine Heredia fue incorrecta o precipitada?

Para mí la medida fue adecuada. Pienso que hay una serie de indicios para investigar a Humala-Heredia. El fiscal debió ya hacer la acusación.

¿Por qué Proética no se pronuncia sobre este caso, no le corresponde?

Hemos hecho pronunciamientos sobre políticas públicas. La decisión del juez fue valiente, había indicios, la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura), el pasaporte italiano, en fin. No queremos otro Toledo.

¿La Refinería de Talara requiere una auditoría? El monto se infla y se infla.

Esta y otras obras elefantiásicas de infraestructura requieren una auditoría y decisión contundentes. Los expertos señalan que Talara no es necesaria y es cara, US$5,400 millones. La pregunta que usted se hace nos la planteamos muchos peruanos: ¿por qué seguimos con esto?

¿No puede exigir esto la Comisión Anticorrupción?

En la Comisión Presidencial lo planteamos en general. Pero el país requiere una explicación contundente de por qué se realiza una obra como Talara, que tiene tantos cuestionamientos.

¿Por qué la pasividad del gobierno sobre este tema?

No lo sé. Al inicio del gobierno, el presidente Pedro Pablo Kuczynski tuvo la oportunidad de parar los Juegos Panamericanos, que no redituarán al país. No pinta bien.

Foto: Perú21

8/08/2017

Proética demanda al Congreso frenar el ingreso de dinero ilícito en la política

El Director Ejecutivo de Proética, Walter Albán, a propósito de las evidentes consecuencias negativas de las modalidades en la que se financia la política en el Perú, planteó la urgencia de que el Congreso de la República emprenda cuanto antes la reforma electoral, a fin de establecer medidas para frenar el ingreso de dinero ilícito a la política y evitar que se continúe debilitando así las instituciones del Estado, a la par de ofrecerle más oportunidades a la corrupción.

“La corrupción tiene aquí una puerta de entrada que, a pesar de las propuestas hechas desde varios actores recientemente, el Congreso mantiene abierta”, dijo Albán en la última edición de la Voz de Proética.

Asimismo, responsabilizó a los sucesivos congresos, por no haber establecido la prohibición de recibir aportes en condiciones casi clandestinas, los cuales se manejan siempre sin mayor control, y es eso lo que se ve reflejado en los testimonios brindados por los implicados en el caso Lava Jato, acerca de cómo financiaron algunas  organizaciones políticas y candidaturas en el Perú.

“Mientras esta omisión se mantenga, nuestro país se encuentra expuesto, vulnerable, porque el dinero sucio seguirá penetrando las campañas, la política y, a través de ella, al Estado”, agregó.

Por ello, sostuvo que la actual legislatura debe abordar cuanto antes la reforma electoral, para ocuparse de este asunto.

“Los peruanos y peruanas debemos permanecer atentos para identificar, al margen de su filiación política, qué congresistas quieren continuar negándose a asumir su responsabilidad”, finalizó

Foto: Agencia Andina

7/08/2017

“Seis líneas, ninguna idea”, por José Ugaz

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  • Por el presidente de Transparency International, José Ugaz
  • Publicado por el diario El Comercio

Luego de revisar el discurso presidencial, no cabe duda de que el problema de la corrupción no es una prioridad para el presidente. Se nota claramente que PPK, como dicen los chicos, “no la ve” en materia de corrupción, no comprende la profundidad y complejidad del fenómeno y, en consecuencia, no le presta la atención que ciertamente se merece.

Luego de abordar la inversión de obras de infraestructura, la seguridad, los tributos, la pequeña y mediana empresa y hasta el tráfico, recién a mitad del mensaje se encuentra un solo párrafo de 6 líneas en el que se menciona la corrupción. Respecto de ella la reflexión del presidente se circunscribe a señalar que “tenemos que trabajar en equipo”. ¿Qué significa eso? ¿A quiénes se refiere cuando dice “tenemos”? ¿Cómo trabajar, en qué áreas, para resolver qué? ¿Hay un plan, prioridades, una estrategia?

El mandatario reconoce el tremendo daño ocasionado por la corrupción (2 puntos del PBI junto con el fenómeno de El Niño) y la responsabiliza de ser una de las principales causas de la falta de crecimiento económico. Siendo así, se esperaba una propuesta integral para enfrentarla y controlarla, más aun cuando, según la última encuesta nacional, la corrupción ha pasado a ser considerada el problema número uno del país.

Hay que recordar que este gobierno –siguiendo la tendencia de los anteriores (Almeyda, ‘petroaudios’, Chehade)– a poco de instalarse en el poder, se estrenó con un escándalo de corrupción protagonizado por Carlos Moreno, asesor presidencial con oficina en Palacio, quien fue grabado negociando con la salud del pueblo para beneficiarse a través de un esquema montado con clínicas privadas.

Sin embargo, no parece haberse aprendido ninguna lección de tan grave circunstancia. En esta materia seguimos tan a la deriva como siempre.

Lo absurdo del tema es que el presidente sí cuenta con un plan de trabajo. Presionado por el ‘affaire’ Moreno, PPK creó la Comisión Presidencial de Integridad (CPI), un grupo conformado por notables personalidades cuyo objetivo fue elaborar un diagnóstico de la situación de la corrupción en el Perú y plantear alternativas concretas al presidente para que impulse una política nacional anticorrupción. Pese al breve término de su mandato, la CPI cumplió con el encargo y le hizo entrega de 100 propuestas.

¿Qué pasó con este informe? No sabemos, pero podemos presumir que fue encarpetado, exactamente como ocurrió con el informe de la Iniciativa Nacional Anticorrupción (INA) que le fue entregado a Toledo al inicio de su mandato.

7/08/2017

La tarea de fortalecer la ética tras el caso de corrupción de Odebrecht

(Por Bruno Bartra Bazán/ Gan@Más). CFA Society Perú llevó a cabo el networking forum ‘Impulsando la ética en el Perú’, en el que reconocidos expertos explicaron qué tanto ha afectado la corrupción en el país y qué se debería hacer de ahora en adelante para que este problema no afecte considerablemente la economía nacional.

Gonzalo Prialé, presidente de la Asociación para el Fomento de la Infraestructura (AFIN), dijo que el caso de corrupción de la empresa constructora Odebrecht, ha provocado que la economía peruana se paralice y que las inversiones se debiliten.

Recordó que antes de esta problemática el Perú crecía cerca de 4.5% por año y agregó que probablemente al término del 2017 sólo se llegue al 2.5%, de lo cual sólo el 1% correspondería al impacto sufrido por los desastres que causó el fenómeno El Niño Costero.

“Hay que castigar a los individuos corruptos; pero, no matar a los proyectos, pues sin estos se ve afectada la economía del país”, expresó Prialé.

Comentó que en muchos países que también enfrentan casos de corrupción no se paralizan los proyectos y los colaboradores eficaces se convierten en la mejor herramienta para restarle fuerza a este gran problema, mientras que en el Perú a estas personas se les suele demandar o incluso terminan en prisión por lo que contaron.

“¿Por qué en Canadá, Inglaterra o incluso Chile; no proliferan los grandes casos de empresas corruptas? Eso se debe a que hay una buena preparación de los concursos, por eso las mejores empresas del mundo compiten para lograr ser la ganadora”, enfatizó.

El especialista hizo un poco de memoria y precisó que en el 2016 el Estado gastó en obras un poco más de S/ 26 mil millones, de los cuales S/. 22 mil 500 millones fueron para pequeñas y medianas obras públicas, y sólo unos S/. 4,300 millones sirvieron para cofinanciar asociaciones público privadas (APP).

Con lo cual dejó en claro que se gasta más en obras que muchas veces se ejecutan en lugares remotos donde el sistema de control del gasto público no llega, así que indicó que se necesita con urgencia un sistema de seguimiento. “Si hay corrupción en APP imagínense cómo es en obras públicas”, acotó.

Prialé sostuvo que también se necesita un pacto nacional entre en Gobierno, la oposición, el Congreso y el sector privado; para impulsar la actividad económica y generar confianza en la sociedad.

Perú herido

Por su parte, Jorge Medina, presidente de Proética, señaló que en los últimos años el Perú ha tenido una mejor performance en lo económico y en la reducción de la pobreza; pero, añadió que le cuesta mucho mantener las cifras en verde y por eso cada vez es menos competitivo.

Recordó que según un reciente reporte mundial de competitividad del World Economic Forum, el Perú ocupa el puesto 101 sobre 138 países en lo que respecta a la conducta ética de las empresas.

Además, manifestó que hace unos años su institución contrató a Ipsos Perú para que hiciera un estudio con las cabezas de las empresas más importantes del país, para saber: ¿Qué piensan los CEO peruanos sobre la corrupción?

Y la mayoría expresó que este problema se presenta mayormente en los sectores: energía, construcción, petróleo y gas; e incluso agregaron que son las compañías brasileñas y chinas las que se encuentran más envueltas en este asunto.

“Quiero agregar que hace unos meses en un almuerzo privado el primer ministro, Fernando Zavala, reveló que el caso Odebrecht le va a costar al Perú no crecer por lo menos un 1%, lo que significa que 150 mil ciudadanos no van a poder salir de la pobreza en el 2017”, lamentó.

Medina consideró que para que el problema de la corrupción no siga creciendo las empresas deben implementar programas de cumplimiento anticorrupción, para prevenir cualquier riesgo y en caso ocurriera podrá ser detectado a tiempo para ser remediado.

Asimismo, dijo que hay que poner en marcha las reformas pendientes que el país necesita, sobre todo la laboral, pues el 70% de la economía es informal.

Buenos consejos

Mientras que Paul Smith, presidente del CFA Institute, le recomendó a las empresas trabajar limpiamente para lograr el sello de aprobación de la sociedad. Explicó que esto se consigue utilizando el conocimiento para el bien público y no para la maximización de los beneficios.

También indicó que deben contar con un código de ética, para poder monitorear sus labores y determinar si han podido cumplir con sus metas. “Deben tener un compromiso con la profesionalidad y los estándares fiduciarios más altos”, precisó.

Finalmente dijo que el CFA Institute defiende a los reguladores como una voz para la reforma, la protección de los inversionistas y la estabilidad en la industria de inversión; ya que de esta manera se puede combatir efectivamente a la corrupción.

2/08/2017

Proética exige al Gobierno priorizar la lucha contra la corrupción

El Director Ejecutivo de Proética, Walter Albán, consideró que faltó una clara línea de acción para fortalecer la lucha contra la corrupción en el segundo Mensaje a la Nación del presidente Pedro Pablo Kuczynski por fiestas patrias. Sostuvo que los escasos aspectos vinculados a esta materia, no fueron abordados de manera que permitan confiar en un buen resultado.

En efecto, más allá de recordar la denominada ‘Muerte Civil’, adoptada ya hace varios meses, el Presidente se limitó a expresar su voluntad de promover la reorganización del actual sistema de control y el rol de la Contraloría, así como una nueva composición del Consejo Nacional de la Magistratura”, indicó en la última edición de la Voz de Proética.

Sin embargo, en lo que respecta a la Contraloría, se trató solamente de un enunciado genérico, casi una aspiración, sin enunciar al menos las líneas maestras que debieran orientar dicha reorganización. .

Pero se mostró preocupado por el anuncio sobre los cambios en el Consejo Nacional de la Magistrura (CNM), ya que no solamente no se abordó la situación de sus actuales miembros, sino que el proyecto de ley planteado por el presidente Kuczynski en esta materia, lejos de mejorar el diseño de esta institución, derivaría en un franco retroceso.

“Se plantea modificar la Constitución, no para mejorar los criterios y formas de elección de sus miembros, garantizando idoneidad y transparencia, sino que se elimina la participación de la sociedad civil, excluyendo a los colegios profesionales y universidades, al tiempo de  reducir su composición de 7 a 5 miembros y otorgándoles representación tanto al Gobierno como al Congreso, con la elección de 2 de ellos. En pocas palabras, en lugar de mejorar la participación de la sociedad civil, se opta por liquidarla, sustituyéndola por un componente directamente político”, manifestó.

Además, señaló que tampoco se tomó en cuenta las recomendaciones de la Comisión Presidencial de Integridad en relación al CNM, no obstante que dicha comisión fue creada por el propio presidente Kuczynski.

“No cabe duda que la lucha contra la corrupción en el sistema judicial, exige partir de revisar la situación del CNM, pero respecto a sus actuales miembros, no a futuro, por lo que, en rigor, el proyecto presentado no califica como una propuesta anticorrupción”, agregó.

Otros temas que estuvieron ausentes en el discurso de PPK para Albán, fueron las acciones para reforzar el Poder Judicial y el Ministerio Público, en las actuales investigaciones y procesos contra los responsables de graves hechos de corrupción.

“En suma, el gobierno del Presidente Kuczynski mantiene pendiente una labor indispensable, si se quiere afrontar con éxito los serios problemas que hoy agobian a los peruanos y peruanas. Desde Proética exhortamos a una rectificación en este sentido”, finalizó.

Foto: Radio Nacional 
31/07/2017

José Ugaz: “El presidente señala que estamos de salida del caso Lava Jato, cuando en realidad recién estamos entrando”

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(Por Luis Felipe Gamarra / Revista Cosas). José Ugaz Sánchez-Moreno es probablemente uno de los pocos abogados peruanos que puede hablar con conocimiento sobre la lucha anticorrupción. Durante catorce meses encabezó la Procuraduría Ad-Hoc para el caso Fujimori-Montesinos, el más importante en la historia judicial peruana, en el que se llegó a sentenciar a más de ciento veinte personajes claves de ese periodo, empezando por el propio Alberto Fujimori.

¿Considera que la elección del nuevo contralor, Nelson Shack, representa un paso firme en materia de lucha anticorrupción?

No necesariamente. La precipitación de la caída del ex contralor Edgar Alarcón no ha permitido un debate amplio para poder auscultar en el pasado de Shack. La oposición ha cuestionado que se haya enviado un solo candidato. Si bien parece tener un buen perfil, hubiera sido ideal generar algo de competencia para poder comparar propuestas. En estos casos, el acceso a los antecedentes, a la trayectoria, ayuda a que sea una elección legítima y se eviten futuros cuestionamientos.

¿Considera que el tema anticorrupción está en el ADN del presidente Pedro Pablo Kuczynski?

Me queda claro que no es su prioridad. Su percepción del problema es superficial. En una entrevista reciente, el presidente señala que estamos de salida del caso Lava Jato, cuando en realidad recién estamos entrando. Si considera que, porque ya salieron dos o tres nombres, hay un presidente preso y otro perseguido, Lava Jato está resuelto, está equivocado. Los implicados están recién por aparecer. En Brasil llevan cuatro años y están en una etapa que dista de ser la de salida.

¿La medida en contra del expresidente Ollanta Humala y su esposa ha sido excesiva?

A diferencia de otros casos, en este hay información de los orígenes del financiamiento que se ha reunido después de tres años de investigaciones. Lo que no se comprende es por qué el fiscal, en lugar de terminar la investigación, formalizando la acusación penal, recurrió a la ampliación de dieciocho meses, dilatando el proceso. No tiene sentido.

¿Cuál cree que ha sido el problema?

Es un problema de enfoque de la Fiscalía. Y, sobre el peligro procesal (la posibilidad de fuga), parece que la decisión del juez no ha sido proporcional. La detención antes de la condena es la última opción para un juez. ¿No bastaba impedimento de salida del país? ¿Una prisión domiciliaria?

¿La justicia peruana está preparada para este caso?

Ningún país, menos en América Latina, por la falta de recursos, tanto humanos como económicos, está realmente preparado para competir con el poder político y económico de la corrupción. Pero existen formas, como en Brasil, que en un caso complejo como este creó una Fuerza de Tareas. En el caso peruano se advierte una falta de coordinación al más alto nivel. En el caso Fujimori-Montesinos, donde se creó el subsistema anticorrupción, se creó un coordinador superior a nivel de la Fiscalía, que hacía que todos los fiscales provinciales actuaran de una manera coordinada. Aquí hay desorden; incluso, hay quienes se declaran en rebeldía frente al sistema anticorrupción.

En este contexto, ¿siente que las exprocuradoras Julia Príncipe y Katherine Ampuero estuvieron a la altura del cargo?

La Procuraduría en general ha sufrido una serie de embates que la han colocado en una situación muy precaria. Eso mismo ha llevado al propio Ministerio Público a que no confíe en la Procuraduría. Aquí ha habido procuradoras que se mandan por su lado. Primero, declaran que no van a pedir reparación civil; después, dicen que sí; primero, hablan de una cifra; después, de otra, y eso genera disfunción. La Procuraduría no está en su mejor momento, porque, además, el Ministerio de Justicia tampoco define cuál será la estructura que tendrá y cuál será el perfil para tener buenos procuradores.

¿Cómo golpea este clima el hecho de que se hable de un indulto a Alberto Fujimori?

Alberto Fujimori, además de estar preso por casos de derechos humanos, se allanó a los casos por corrupción. Es claro que sería un golpe para la lucha anticorrupción. El problema del presidente Kuczynski, que está evaluando esta posibilidad, es que él es un hombre que viene del mundo empresarial, sin historia en materia anticorrupción, ni lucha por los derechos humanos. Viene de las finanzas, donde todo lo que fue violencia política fue ajeno e incomprendido.

¿Su olfato de exprocurador le dice que hay suficientes indicios para ir detrás de Alan García?

En materia penal no puedes confiar en tu olfato. Hay que analizar lo que hay sobre la mesa, y hay elementos iniciarios: su amistad con Barata, su participación en las obras, su entorno, donde ya hay gente procesada y detenida. Todo justifica por lo menos una indagación más profunda; por eso, llama la atención que, viniendo de Brasil una mención a la situación de financiamiento de partidos, la Fiscalía no haya tomado ese elemento para abrir otra investigación.

31/07/2017

“Liderazgo: ser, hacer y parecer”, por Jorge Medina

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  • Por el presidente de Proética, Jorge Medina.
  • Publicado en el diario El Comercio.

En las últimas décadas hemos visto la agudización de dos fenómenos. Por un lado, la infiltración de la economía ilegal en la política, y, por el otro, el incremento de la gran corrupción descentralizada en megaproyectos de infraestructura. Ambos fenómenos revelan cómo el (mal) interés político se mezcla con el (mal) interés privado para beneficiarse indebidamente en perjuicio del país.

Por eso, la declaración del presidente Pedro Pablo Kuczynski en su reciente mensaje –“la lucha anticorrupción requiere un trabajo en equipo”– es muy importante, pues la corrupción funciona a través de redes y complicidades, y para enfrentarla eficazmente se necesita crear una estructura fuertemente cohesionada. Quien debe liderar ese trabajo en equipo es el propio presidente de la República. Ese liderazgo, lamentablemente, no se percibió en su reciente mensaje presidencial, ni se percibe con nitidez en lo que va de su gestión. La ausencia de un liderazgo fuerte y visible es grave porque no ayuda a cambiar la autopercepción de ser un país en el que campea la corrupción e impunidad.

Según la última encuesta de Ipsos para El Comercio, el 48% de los peruanos cree que el combate a la corrupción –fenómeno que figura nuevamente como el principal problema del país– está peor respecto a hace un año. Seis de cada diez peruanos desaprueban la gestión del presidente y el 34% apunta, entre las razones para ello, a su falta de autoridad o carácter.

Si bien PPK ha dado algunas normas positivas para combatir la corrupción (la “muerte civil”, por ejemplo) y ha anunciado en su discurso la presentación de un proyecto de ley para reformar la conformación del Consejo Nacional de la Magistratura (aunque quizás hubiese sido mejor la propuesta de la Comisión Presidencial de Integridad de que al menos la mitad de los integrantes del CNM sea elegida por concurso público), entre otras medidas, su mensaje careció de declaraciones más enérgicas. Por ejemplo, pudo haber hecho referencia a la urgente necesidad de una verdadera reforma electoral que, entre otras cosas, prevenga el financiamiento ilícito a la política, o a la reforma integral que requiere el Sistema Nacional de Control, incluyendo la completa reestructuración de la contraloría, para prevenir y combatir la gran corrupción.

El presidente tiene la oportunidad de liderar un gran movimiento nacional que integre a todas las fuerzas del país (sociales, políticas y económicas). Su visión, energía y entusiasmo son atributos necesarios para inspirar a que los peruanos unamos esfuerzos para transitar de la cultura de transgresión reinante en nuestro país a una cultura de transparencia e integridad. Cuando el presidente dice “el agua va a ser el legado de este gobierno”, “la salud es demasiado importante como para esperarla en una cola” o “la lucha de las mujeres es mi lucha”, inspira y persuade. La ciudadanía espera esa misma energía en temas anticorrupción. Su reciente discurso, en este tema, pareciera no izar una bandera común que aglutine a los peruanos dispuestos a trabajar para erradicar la corrupción y la impunidad.

Si el presidente ejerce un claro liderazgo en este tema, logrará el apoyo ciudadano que requiere para comprometer a actores relevantes –como la academia, la empresa privada, los medios o la juventud– a trabajar en equipo y exigir las reformas que debe hacer el Congreso para frenar la corrupción. Sin estas reformas los costos de la corrupción seguirán frenando nuestro desarrollo y será muy difícil lograr, no solo el crecimiento económico del 4% proyectado por el jefe de Estado para el 2018, sino la revolución social de la que nos volvió a hablar en su mensaje del 28 de julio.

Dotar de agua a todos los peruanos, mejorar la educación y los servicios de salud, mejorar la seguridad ciudadana, reducir la pobreza de 20,5% a 15% y desaparecer “virtualmente” la pobreza extrema el 2021, no será posible si no se ataca la causa transversal que impide nuestro progreso: la corrupción. Y eso pasa por convocar y convencer a los peruanos en ir por el camino correcto de las urgentes reformas (política, judicial, policial, etc.) que nos conviertan en un país transparente y justo.

Con el liderazgo adecuado haremos más difícil el camino de aquellos que creen que la vida se les facilita cuando dan o reciben una coima o cuando lucran con el erario nacional.

Frente a la corrupción también tenemos que ser –y parecer– “una sola fuerza”.

31/07/2017

Cámara de Comercio de Lima convoca a participar al XIII Premio Anual al Periodismo “Ramón Remolina Serrano”

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La Cámara de Comercio de Lima invita a los profesionales de la comunicación a participar en el XIII Premio Anual al Periodismo “Ramón Remolina Serrano”.

El concurso se titula “Los sobrecostos de la burocracia para las empresas y vías de la solución”, y tiene como objetivo incentivar el interés de la prensa nacional para promover reportajes y artículos de análisis, debate, investigación y solución sobre las graves consecuencias de las barreras burocráticas en el desarrollo empresarial y económico.

Las trabas burocráticas ralentizan el quehacer empresarial y de la sociedad en general, pues generan costos absurdos que los peruanos se ven en la necesidad de atender. Además, el exceso de burocracia propicia la corrupción y desincentiva la formalización y resta competitividad.

Los comunicadores pueden participar en cuatro categorías: periodismo escrito, radial, televisivo y digital. Asimismo, los trabajos periodísticos deben haber sido publicados, difundidos o transmitidos entre el 1º de septiembre de 2016 y el 31 de agosto de 2017.

El ganador de cada categoría percibirá el monto de S/6.000 y un diploma de la Cámara de Comercio de Lima. El segundo puesto de cada categoría recibirá un total de S/1,500 y un diploma de la Cámara de Comercio de Lima.

Los trabajos pueden ser presentados al Jurado Calificador hasta el 31 de agosto del 2017 en formato físico o digital.

Esta edición cuenta con el auspicio de Coca-Cola, Petramás, Southern Copper y Pricewaterhousecoopers.

Para mayor información, pueden escribir a dbernizon@camaralima.org.pe, ccl-imagen@camaralima.org.pe o llamar a los teléfonos 219-1820 y 219-1817

25/07/2017