París, 02 de diciembre.- El día de ayer, en el Pabellón Perú de la COP21, se oficializó el primer desembolso de 5 millones de dólares del acuerdo suscrito en setiembre de 2014 entre los gobiernos de Perú, Noruega y Alemania para la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero procedentes de la deforestación y degradación de bosques y el desarrollo sostenible (REDD+). Este fondo será administrado por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Además de agradecer el apoyo de Noruega y Alemania para la sostenibilidad del bosque amazónico, el Ministro del Ambiente, Manuel Pulgar Vidal, resaltó que este fondo pasó por un proceso de consulta que involucró la participación de gobiernos locales y regionales y pueblos indígenas, y que se han adoptado planes para la sostenibilidad del acuerdo enfocándose en los resultados. Estos 5 millones son solo la primera parte de la primera etapa (50 millones) de un fondo total que asciende a 300 millones, que se debe desembolsar en tres etapas en los próximos años.
Este fondo incluye un componente de fortalecimiento institucional, que va en la línea de la Ley Forestal y sus reglamentos. Es conveniente señalar que este y otros fondos deben dialogar con la Estrategia Nacional de Bosques y Cambio Climático (ENBCC), la cual debe ser aprobada en el primer trimestre de 2016, como resultado de un proceso participativo, según hizo saber Gustavo Suárez de Freitas, Coordinador Ejecutivo del Programa Nacional de Conservación de Bosques para la Mitigación del Cambio Climático, durante su intervención. El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) viene apoyando técnicamente el desarrollo de este instrumento, como lo hizo con los reglamentos de la ley. Una sólida base técnica es requisito para que se desembolse lo que falta para completar la primera etapa del fondo NORAD.
Suárez de Freitas llamó la atención sobre la titulación de tierras para los pueblos indígenas, al cual calificó como el componente más complejo de trabajar en esta etapa de preparación de dispositivos legales e institucionales, debido a que exige coordinación muy especializada entre distintos niveles de gobierno, además de varios otros factores. Al respecto, el Gobernador Regional de San Martín, Víctor Manuel Noriega, hizo hincapié en la necesidad de articular el trabajo regional y nacional y en la necesidad de contar con recursos técnicos, humanos y financieros para aterrizar las propuestas a nivel sub-nacional.
De otra parte, Oseas Barbarán, Presidente de la Confederación de Nacionalidades Amazónicas del Perú (CONAP) manifestó los pueblos indígenas son actores cruciales en la gobernanza de los bosques y es necesario que puedan empoderarse para aprender a administrar técnicamente sus proyectos, dentro de este fondo y de los que vengan en los próximos años.
Proética, capitulo peruano de Transparencia Internacional, quiere llamar la atención sobre la importancia de asegurar pilares sólidos de transparencia y participación ciudadana en la administración de los fondos para la conservación de bosques. Es sumamente importante, en estas etapas iniciales de diseño y gestión, prestarle atención a los altos niveles de informalidad, a los bajos niveles de cumplimiento de la ley y la actividad de organizaciones criminales en los márgenes de la institucionalidad pública, particularmente en zonas, donde activistas ambientales han llegado incluso a ser asesinados. La promesa de 300 millones es tremendamente apetitosa para la corrupción. El país tiene la obligación de asegurar un uso íntegro de estos fondos.